Desmantelan a banda que roba “rapiditos”



Cuatro individuos resultaron detenidos por funcionarios del Comando Nacional Antiextorsión y Secuestro (Conas) de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), cuando intentaban cobrar 500 mil bolívares como rescate para devolver a su dueño un Fiat Uno Fire 1.3, que le habían robado días atrás en la avenida La Mata de Cabudare.
Estas personas integraban una banda dedicada a hacerse con automóviles de vieja data que son utilizados en el trasporte público como “rapiditos” y pedían altas sumas de dinero para devolverlos a sus dueños aunque en esta oportunidad había salido de lo habitual.
Los aprehendidos durante el procedimiento realizado en la comunidad de Veragacha, parroquia Santa Rosa del municipio Iribarren, aproximadamente a las 6:00 p.m., fueron Edicson Escobar Silva (38), a quien se le incautó una escopeta calibre 12, Mendoza Ender (24), Fritzy Liscano Robertis y un menor de 17 años de edad.
Se maneja de manera extraoficial que con dichas capturas el Conas logra desmantelar la banda que comúnmente operaba en el este de Barquisimeto y en el municipio Palavecino.
Caen tres de la banda de Los Hermanos Cocó
El oportuno accionar del Grupo Antiextorsión y Secuestro (GAES) de la GNB permitió la recuperación de un Toyota Yaris color gris que le habrían arrebatado a una dama a mano armada dos atracadores en la carrera 19 con calle 38 de Barquisimeto.
Luego de varias llamadas de extorsión, la mujer decidió colocar la denuncia, por lo que por indicación del cuerpo de seguridad pautaron una entrega controlada en el barrio El Carmen. Allí, lograron la detención de un menor de 17 años de edad y de Kilver Yánez Rangel (22), quienes se vieron obligados a revelar donde mantenían oculto al carro robado.
Fue así como otro grupo de castrenses fue guiado hasta un matorral en El Cují, en el que se encontraba el Toyota Yaris robado, que estaba siendo resguardado por Jeiferson Crespo Rangel (18), hermano de Yánez Rangel. Durante el proceso fue decomisaba una motocicleta en la que se trasladaban los dos primeros malhechores y un Fiat Uno que era utilizado por Crespo Rangel.
Se supo que los tres individuos hacían vida en una organización delictiva que hacen llamar Los Hermanos Cocó.